Senador Julián Bedoya y la presunta obtención fraudulenta de su título de abogado.

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La formulación de cargos por parte de la Procuraduría General de la Nación en contra del Senador Julián Bedoya Pulgarín por su presunta responsabilidad de obtener un título de abogado de manera fraudulenta en la Universidad de Medellín utilizando su envestidura como congresista, ha causado indignación en muchos sectores del país; ante este hecho también lo investigan el Ministerio de Educación, la Corte Suprema y el Consejo de Estado.

El congresista insistió que el tema de obtener un título de manera fraudulenta es algo personal y no tiene nada que ver con su envestidura, por lo que pidió a la procuraduría que revoque su decisión sancionatoria ya que el organismo de control no es competente para investigarlo.

Recordemos que el polémico caso da cuenta desde el momento en que la procuraduría en su investigación descubre que Julián Bedoya presentó dieciséis exámenes, entre preparatorios y suficiencias, en tres días; frente a esto la defensa de Bedoya subraya que esa hazaña es difícil pero no es imposible.

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Sin embargo, el decano en derecho de la universidad de Medellín, el abogado Francisco Javier Valderrama Bedoya indicó que no es común que un estudiante presente varios exámenes en una misma fecha o en una misma semana y que tampoco es usual que los apruebe en su totalidad; pero para la defensa del Senador la actuación de la procuraduría es reprochable desde todo punto de vista debido a que no puede desatender la capacidad intelectual y rigor de estudio de su cliente para aprobar los exámenes.

Ante la procuraduría los alegatos del abogado defensor no tuvieron fundamento, por lo que el ente de control reconfirmó su decisión sancionatoria, lo que obligó a Bedoya a interponer una acción de tutela que perdió en primera y segunda instancia, en el Tribunal Superior de Bogotá y en la Corte Suprema de Justicia.

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