En medio de una ostentosa ceremonia militar, el primer ministro norcoreano Kim Jung Un, presentó al mundo su nueva adquisición de ataque nuclear, se trata de un submarino modificado y adaptado con una capacidad bélica que supera las expectativas en técnicas de combate marino y fue asignado a fortalecer las flotas navales que se encuentran ubicadas entre la península de Corea y Japón.
El submarino número 841, llamado Héroe Kim Kun Ok, es un submarino de clase Romeo de la era soviética, que Corea del Norte adquirió de China en la década de 1970 y comenzó a producir en el país. Su diseño, con 10 escotillas de tubos de lanzamiento, mostraba que lo más probable era que estuviera armado con misiles balísticos y misiles de crucero.
Los expertos indican que el nuevo juguete bélico de Kim Jung no sumará apoyo de manera eficiente alas robustas fuerza terrestres del norte, esto debido a que los viejos que hacen parte de la flota norcoreana son relativamente ruidosos y lentos, además tienen un alcance limitado, esto quiere decir que ante una guerra es posible que no no sobrevivan tanto tiempo, insistió Vann Van Diepen, el experto en armas del gobierno de Estados Unidos que trabaja con el proyecto 38 Norte en Washington. «Cuando esto se despliegue sobre el terreno, será bastante vulnerable a la guerra antisubmarina aliada», dijo. «Así que creo que desde un punto de vista militar testarudo esto no tiene mucho sentido».
Entre tanto, los militares surcoreanos en su concepto tienen claro que el submarino no está listo para desarrollar operaciones normales, pues lo que quiere el gobierno de Corea del Norte es impresionar y exagerar en sus capacidades de combate.
El líder norcoreano insiste en que el armar a la marina con armas nucleares es una necesidad urgente, por esto insistió en que va a adquirir más buques y submarinos equipados con armamento nuclear, por lo que desea construir submarinos de propulsión nuclear, dijo Kim en la ceremonia de lanzamiento.
Corea del Sur y Japón se pronunciaron en contra de las provocaciones de Kim Jung e insisten que las armas nucleares de Corea del Norte están prohibidas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y el lanzamiento del submarino provocó la condena de las dos naciones.
Corea del Norte tiene alrededor de 20 submarinos de clase Romeo, que funcionan con motores diésel-eléctricos y son obsoletos según las normas modernas, mientras que la mayoría de los demás países los operan sólo como buques de entrenamiento.
